Los objetivos de una buena posición a caballo son primeramente la comodidad del jinete, también la mejor disposición para usar sus ayudas fácilmente.
Una posición del jinete a caballo sería la de la imagen. Todo el cuerpo tiene que estar relajado con una mínima tensión para mantener la postura. La cabeza tiene que estar relajada y erguida mirando por encima de las orejas del caballo, los hombros caen sobre el cuerpo relajados sin haber ningún encorvamiento de la espalda, los codos tienen que estar recto hacia abajo y pegado al torso mientras que las manos, colocadas con los pulgares hacia arriba, mantienen una posición tal que exista una línea recta formada por: boca del caballo, manos y codos del jinete.